Descubriendo una de las joias del Valle de Remuñe, el corredor E de la Tuca de Lliterola
Detalles técnicos
- Punto de salida y llegada: parking Valle de Remuñe.
- Distancia total: 14 km aproximadamente.
- Desnivel positivo: 1120m.
- Altura máxima y mínima: 2825m (Tuca de Lliterola) y 1780m (carretera A-139, desvío izquierda antes de Llanos del Hospital).
- Duración: 6 horas.
- Dificultad actividad: Alta, especialmente si queremos bajar esquiando el corredor Jean Arlaud. La subida tiene dos zonas comprometidas, el resalte mixtas del corredor, y el posterior ascenso a la cresta somital
- Material: esquís, botas, pieles de foca, crampones, pala arva y sonda, 2 piolets técnicos, arnés, 1 cuerda de 30m, reverso, polea autoblocante, juego de 7 tascones, 2 tornillos de hielo, pitones, cintas expres extensibles, bagas y cordinos, bastones, bastón piolet, casco.
- Cartografía: Alpina Aneto Maladeta.
Ascenso y descenso del corredor Jean Arlaud a la Tuca de Lliterola, dentro del valle de Remuñe (track sólo de subida, la bajada es por el mismo lugar). Estética y escondido, una joya en medio de un entorno salvaje y solitario.
Partimos del final de carretera donde comienza el sendero hacia el valle y el Ibon de Remuñe. Superamos la zona boscosa y tras un flanqueo entre bloques, una pequeña bajada nos deja en el característico inicio del valle de Remuñe. Cerrado por las grandes paredes de roca y con el río y el puente en medio, la silueta de la Forca de Remuñe al fondo del valle nos da la bienvenida. Después de unos metros siguiendo el cauce, tomamos el desvío a la izquierda, dejando la ruta normal que sigue recta.
Entrada al valle de Remuñe, con el desvío a la izquierda dirección al Ibon de Remuñe.
Ganamos altura por la izquierda de la gran roca que separa las dos rutas hasta llegar al estanque de Remuñe. A la izquierda empieza lo bueno. Dos palas relativamente anchas y con pendientes de 35º aprox. para ir directos al corredor. La de la derecha es un poco más asequible y dejamos la de la izquierda para la bajada. Después supera el desnivel, comienza una diagonal a la izquierda hasta encontrar otra pala ancha a la derecha de unos cien metros, que nos deja en un plano privilegiado donde ya vemos la cima al completo y la entrada del corredor. Seguimos subiendo progresivamente hasta llegar al cono de salida y posteriormente en el punto donde se estrecha. Cambiamos esquís para crampones y piolet y saboreamos unos primeros metros con nieve polvo y una pendiente mantenido de 40-45º hasta llegar al resalte del tramo final. La cosa se pone complicada, pero con un poco de maña y sangre fría se supera bien. Primero por la izquierda, luego flanqueando por una pequeña repisa de nieva hacia la derecha y superando el tramo final por un paso de IV hasta salir a la continuación del corredor. Menos de cien metros y llegamos a la arista N de roca que conduce a la cima. Dejamos esquís y decidimos subir por un pequeño corredor de nieve que luego se transforma en goulotte hasta el pico de la Tuca Blanca de Literola.
Des del plano, la entrada del corredor Jean Arlaud ya se dejaba ver.
Aresta somital, aérea y un mirador perfecto del Pico Alba, las Maladetas, el Aneto, la cresta del Maupas, el Perdiguero y el Posets.
El descenso más asequible es por detrás, directo hasta el valle Literola, bajando un terreno variado de prados innivados y algunas rocas.
Nuestra idea es esquiar el corredor, así que deshacemos la cresta somital y destrepar la goulotte (se puede rapelar) hasta llegar al inicio del corredor Jean Arlaud. Calzamos esquís y disfrutamos del primer tramo hasta el resalte. Aquí, lo mejor es enlazar alguna roca o meter algún pitón para montar un rápel de seis metros aproximadamente hasta superar la zona rocosa, muy helada y expuesta. En la parte central del resalte hay dos buriles de la época con dos chapas de poco fiar sin mucho sentido. Nosotros con mucho cuidado y sangre fría destrepar las dos secciones de roca, aprovechando las zonas de nieve para coger aire. Volvemos a sacar los crampones y calzar esquís para disfrutar del segundo tramo del descenso, muy vertical y mantenido que permite giros con velocidad hasta el tramo final donde se estrecha un poco. El descenso final continúa por la ruta de subida, hasta el estanque de Remuñe, el valle y posteriormente la zona boscosa hasta la carretera. Una gran actividad alpina con ambiente y terreno variado. Sin excesivas complicaciones en la subida, pero que exige tener recursos y habilidades en este tipo de entornos.
Entrada al corredor, todo una declaración de intenciones. Prohibido fallar!
Track activitat (sólo de ascenso. El descenso es siguiendo la misma ruta)
Deja un comentario